Este retiro es una oportunidad de parar todo e ir hacia dentro, al centro del corazón, al Amor… al Ser, nuestra verdadera naturaleza. 

En el día a día, la experiencia general como personas es sentirnos limitadas y separadas y a través del amor experimentamos la unión como un atisbo o recuerdo de la Verdad de nuestra naturaleza. 

La mayor forma de expresión de este amor es la devoción a la Fuente de la que emana todo…el Ser Eterno 

El corazón anhela mostrar este amor de miles de formas y maneras, tan ricas y variadas como son nuestras diferencias humanas. Y todas ellas confluyen en un mismo anhelo, la Dicha Infinita, el regreso al Ser que es nuestra verdadera naturaleza y hogar

 Dar rienda suelta a la devoción, a la voluntad de amar, entregarse, y rendirse en Sus brazos es el alimento que en el camino espiritual nos impulsa al Amor, a un deseo más intenso de Libertad y purifica nuestra mente y corazón del sufrimiento que nos provocamos desde nuestra ignorancia y confusión

Por eso este retiro, más allá de las diferentes formas, vías, enseñanzas, que siga cada persona, es un punto de encuentro y de expresión del amor por el Ser a través de una devoción sincera y un propósito de soltar, entregarse y rendirse al Amor

Pasa inevitablemente por el descubrimiento de barreras y estrategias del ego (sentimientos, patrones, posiciones mentales, etc.) para no entregarse y rendirse, y aprender a liberarlas y dejarlas ir para aligerar el corazón. 

Es en sí un canto a lo Sagrado, una entrega más profunda al Amor, en grupo, una rendición a la Fuente, a nuestro Ser, que irremediablemente nos lleva a sentir en el corazón la plenitud, paz y silencio que Somos.

Morir por Amor, a lo que nos aferrábamos y creíamos ser, para permitir que florezca…quién verdaderamente Somos, el Ser

*Inspirado (prácticas y textos) en enseñanzas espirituales (Advaita y otras) centradas en el Ser